Todos los que practicamos alguna disciplina artística, ya
sea la escritura, la pintura, la fotografía, la escultura, la cerámica, la
música u otras diferentes, como medio de expresión de nuestros sentimientos e
inquietudes.
Somos plenamente conscientes de los difícil y duro que
a veces puede resultar andar ese camino, transmitir nuestra emociones a las
demás se convierte en un laberinto de dificultades que nos llevan en algún
momento incluso a dimitir de tal idea.
Por ello, es vital para nosotros encontrar siempre un
puente, una mano amiga y altruista que nos sirva de nexo, entre nuestras obras
y el público.
El placer y satisfacción de ver nuestras obras
expuestas o divulgadas, supera con creces los beneficios económicos y
materiales que están pueden reportarnos.
Con estas palabras que representan a todos los que
compartimos más inquietudes expresivas y artísticas, queremos aquí y ahora,
darte las gracias por hacer de tu casa, nuestra casa, un lugar de encuentro,
que nos sirve para hacer estallar como si de una bolsa de confetis se tratara,
la Cultura y la Amistad, desparramándola por todos los rincones de Chipiona.
Curiosamente elegiste un nombre muy significativo
“Espacio Vacío”, para un espacio singular, que siempre está lleno, lleno de sentimientos,
emociones y expresividad, que se renuevan constantemente, como el ir y venir de
las olas del mar, lleno de aire y frescura.
Más de 400 exposiciones, conferencias, presentaciones
literarias y un sinfín de artistas y músicos que han pasado por aquí, dejando
cada uno de ellos su huella y su importa.
Veinte años, que no son poco y han dado para mucho,
prueba de ello son los incontables recuerdos que cuelgan de sus paredes,
historias personales y colectivas, no exentas de nostalgia por tiempos pasados.
Gracias Mamé. Por ser como decía Machado en uno de sus
poemas “Un hombre bueno, en el buen sentido de la palabra bueno”.
Tu trabajo y bondad desinteresada hacen que todos de
alguna manera podamos crecer con el paso del tiempo.
Este es el reconocimiento público de muchos hombres y
mujeres que nos sentimos vinculados a éstas cuatros paredes, un refugio para la
“Cultura y la Amistad”.
Ojalá dentro de veinte años no demos cita de nuevo aquí
y con más canas y arruga en la piel, podamos presumir de tener el alma intacta.
